jueves, 20 de febrero de 2014

terminos direccionales


TÉRMINOS DIRECCIONALES

Para localizar las distintas estructuras del cuerpo, los anatomistas utilizan términos direccionales específicos, palabras que describen la posición de una parte del cuerpo en relación con otra. Varios términos direccionales son pares significados opuestos, por ejemplo anterior (frente) y posterior (dorso).
 
 

 


REGIONES ANATÓMICAS

El cuerpo humano se divide en varias regiones principales que pueden identificarse desde el exterior. Éstas son la cabeza, el cuello, el tronco, los miembros superiores y miembros inferiores. La cabeza está formada por el cráneo y la cara. El cráneo contiene y protege el cerebro; la cara es la parte frontal de la cabeza que incluye ojos, nariz, boca, frente, pómulos, y mentón. El cuello soporta el peso de la cabeza y la mantiene unida a al cuerpo.

El tronco está formado por el tórax, el abdomen, y la pelvis. Cada miembro superior está unido también al tronco y está formado por el hombro, la axila, el brazo, el antebrazo, muñeca y mano. Cada miembro inferior está unido también al tronco y está formado por la nalga, el muslo, pierna, tobillo y pie.
 

 
 
 
 
 
 
 
 
 



CAVIDADES ANATÓMICAS

Las cavidades corporales son espacios dentro del cuerpo que protegen, separan y dan sostén a los órganos internos. Huesos, músculos, ligamentos y otras estructuras separan las distintas cavidades corporales entre sí. Aquí se describen algunas de las principales cavidades corporales.

La cavidad craneana está formada por los huesos del cráneo y contiene al cerebro. Los huesos de la columna vertebral forman el conducto vertebral (conducto espinal), que contiene la médula espinal. La cavidad craneana y vertebral se hallan recubiertas por tres capas de tejido protector denominadas meninges.

Las principales cavidades corporales del tronco son cavidad torácica y la abdominopelviana. La cavidad torácica está formada por las costillas, los músculos del tórax, el esternón y la porción torácica de la columna vertebral. Dentro de la cavidad torácica se encuentra la cavidad pericárdica, un espacio lleno de lpiqueido que rodea al corazón, y dos cavidades pleurales. Cada cavidad pleural rodea a un pulmón y contiene una pequeña cantidad de líquido. La porción central de la cavidad torácica se denomina mediastino. Se encuentra entre los pulmones y se extiende desde el esternón hasta la columna vertebral y desde el cuello hasta el diafragma. El mediastino contiene todos los órganos torácicos excepto a los propios pulmones, lo que incluye el corazón, el esófago, la tráquea el timo y grandes vasos sanguíneos.  El diafragma es un musculo con forma de cúpula que separa la cavidad torácica de la abdominopelviana.
La cavidad abdominoperlviana se extiende desde el diafragma hasta la ingle y está rodeada por la pared abdominal y los huesos y músculos de la pelvis. Como su nombre lo sugiere, la cavidad abdominopelviana está dividida en dos porciones, pese a que no hay ninguna cavidad que las separe. La porción superior, la cavidad abdominal, contiene el estómago, el bazo, el hígado, la vesícula, el intestino delgado y la mayor parte del intestino grueso. La porción inferior, la cavidad pelviana, contiene la vejiga, partes del intestino grueso y los órganos del sistema reproductor. Los órganos que se encuentran
 
 
 
 

SISTEMA CARDIOVASCULAR

En el ser humano es un músculo hueco y piramidal situado en la cavidad torácica. Funciona como una bomba aspirante e impelente, impulsando la sangre a todo el cuerpo. Éste órgano vital late unas 100 000 veces por día, lo que suma 35 millones de latidos por año y 2 500 millones de veces en toda una vida

 
 
 

Si se considera la importancia de su función, el corazón es un órgano relativamente pequeño, casi del mismo tamaño que un puño cerrado. Mide alrededor de 12 cm de largo, 9 cm en su punto más ancho y 6 cm de espesor, con respecto al promedio pesa alrededor de 250 g en mujeres adultas y 300 en hombres adultos. El corazón se apoya en el diafragma, cerca de la línea media de la cavidad torácica y se encuentra en el mediastino, una masa de tejido que se extiende desde el esternón hasta la columna vertebral, desde la primera costilla hasta el diafragma y entre los pulmones. Aproximadamente dos tercios del corazón se encuentran a la izquierda de la línea media del cuerpo. Se puede imaginar al corazón como un cono que yace de lado.

 El vértice o punta (ápex) está formada por el ventrículo izquierdo y descansa sobre el diafragma. Se dirige hacia adelante, hacia abajo y hacia la izquierda.  La base del corazón es su superficie posterior: Está formada por las aurículas, principalmente la aurícula izquierda. Además de la base y el ápex, el corazón tiene diferentes caras y bordes. La cara inferior es la que se encuentra en el vértice y borde derecho y descansa principalmente sobre el diafragma. El borde derecho mira hacia el pulmón derecho y se extiende desde la cara inferior hasta la base; contacta con el pulmón derecho y se extiende desde la superficie inferior hasta la base. El borde izquierdo, también denominado borde pulmonar, mira hacia el pulmón izquierdo y se extiende desde la base hasta el ápice. 


 
 
 Pericardio
El pericardio es una membrana que rodea y protege el corazón; lo mantiene en su posición en el mediastino y, a la vez, otorga suficiente libertad de movimientos para la contracción rápida vigorosa. El pericardio divide en dos partes principales: 1) el pericardio fibroso y 2) el pericardio seroso. El pericardio fibroso es más superficial y está compuesto por tejido conectivo denso, irregular, poco elástico y resistente. El pericardio fibroso evita el estiramiento excesivo del corazón, provee protección y sujeta el corazón al mediastino. El pericardio fibroso, cerca de la punta del corazón, está parcialmente fusionado con el tendón central del diafragma y, por tanto, cuando éste se mueve, en el caso de la respiración
profunda, facilita el flujo de sangre en el corazón. El pericardio seroso es más profundo, más delgado y delicada, y forma una doble capa alrededor del corazón. La capa parietal externa del pericardio seroso se fusiona con el pericardio fibroso. La capa visceral interna, también denominada epicardio es una de las capas de la pared cardiaca y se adhiere fuertemente a la superficie del corazón. Entre las capas visceral y parietal del pericardio seroso, se encuentra una delgada película de líquido seroso. Esta secreción lubricante, producida por las células pericárdicas y conocida como líquido pericárdico, disminuye la fricción entre las hojas del pericardio seroso cuando el corazón late. Este espacio que contiene unos pocos mililitros de líquido pericárdico se denomina cavidad pericárdica.
 



Capas de la pared cardiaca

La pared cardiaca se divide en tres capas: el epicardio (capa externa), el miocardio (capa media) y el endocardio (capa interna). El epicardio está compuesto por dos planos tisulares. El más externo es una lámina delgada y transparente que también se conoce como capa visceral del pericardio seroso y está formada por mesotelio. Debajo del mesotelio, existe una capa variable de tejido fibroelástico y tejido adiposo. El tejido adiposo predomina y se engrosa sobre las superficies ventriculares, donde rodea las arterias coronarias principales y los vasos cardiacos. El epicardio le da una textura suave a la superficie externa del corazón. El epicardio contiene vasos sanguíneos, linfáticos y vasos que irrigan el miocardio.

            El miocardio, tejido muscular cardiaco, confiere volumen al corazón y es responsable de la acción de bombeo. Representa el 95% de la pared cardíaca. Las fibras musculares, están envueltas por tejido conectivo compuesto por endomisio y perimisio. Las fibras del músculo cardiaco están organizadas en haces que se rosa en acción de bombeo. Aunque es estriado como el músculo esquelético, el músculo cardíaco es involuntario como el músculo liso.

La capa más interna, el endocardio, es una fina capa de endotelio que se encuentra sobre una capa delgada de tejido conectivo. Formado por una pared lisa, tapiza las cámaras cardiacas y recubre las válvulas cardiacas. El endotelio minimiza la superficie de fricción cuando la sangre pasa por el corazón y se continúa con el endotelio de los grandes vasos que llegan y salen del corazón.

 
 





Cámaras cardíacas
            El corazón posee cuatro cámaras. Las dos cámaras superiores son las aurículas (atrios) y las dos inferiores son los ventrículos. Las dos aurículas reciben la sangre de los vasos que traen de regreso al corazón, las venas, mientras que los ventrículos la eyectan desde el corazón hacia los vasos que la distribuyen, las arterias. En la cara anterior de cada aurícula se encuentra una estructura semejante a una pequeña bolsa denominada orejuela. Cada orejuela aumenta ligeramente la capacidad de las aurículas, lo que les permite a éstas recibir un volumen de sangre mayor. Además, en la superficie del corazón existen una serie de surcos que contienen vasos coronarios y una cantidad variable de grasa. Cada surco marca el límite externo entre dos o más cámaras cardíacas. El surco coronario profundo rodea a casi todo el corazón y limita dos sectores: el sector auricular (superior) y el ventricular (inferior). El surco interventricular anterior es una hendidura poco profunda, ubicada en la cara anterior del corazón, que marca el límite entre el ventrículo derecho y el izquierdo. Se continúa en la cara posterior como el surco interventricular posterior, delimitando ambos ventrículos en la parte posterior del corazón.
 
 
 
Aurícula derecha
La aurícula derecha (atrio derecho) recibe sangre de tres venas: la vena cava superior, la vena cava inferior y el seno coronario. Las paredes de la aurícula derecha tienen un promedio de espesor de 2 a 3 mm. Las paredes, anterior y posterir de la aurícula derecha difieren mucho entre sí. La pared posterior es lisa; la pared anterior es trabeculada, debido a la presencia de crestas musculares denominadas músculos pectíneos, que también se extienden dentro de la orejuela. Entre la aurícula derecha e ixquierda se encuentra un tabique delgado, denominado septum o tabique interauricular. La sangre pasa desde la aurícula derecha hacia el ventrículo derecho a través de la válvula tricúspide, que posee tres valvas o cúspides.
 
 
Ventrículo derecho
            El ventrículo tiene una pared de entre 4 y 5 mm, y forma la mayor parte de la cara anterior del corazón. En su interior contiene una serie de relieves constituidos por haces de fibras musculares cardiacas denominadas trabéculas carnosas. Algunas de estas trabéculas forman parte del sistema de conducción cardíaco. Las cúspides o valvas de la válvula tricúspide se conectan mediante cuerdas de apariencia tendinosa, las cuerdas tendinosas, que a dsu vez se conectan con trabéculas cónicas denominadas músculos papilares. El ventrículo derecho se encuentra separado del ventrículo izquierdo por el septum o tabique interventricular. La sangre pasa del ventrículo derecho, a través de la válvula pulmonar hacia una gran arteria, el tronco pulmonar, que se divide en las arterias pulmonares derecha e izquierda que transportan la sangre hacia los pulmones. Las arterias siempre llevan la sangre fuera del corazón.
 
Aurícula izquierda
         La aurícula izquierda forma la mayor parte de la base del corazón. Recibe sangre proveniente de los pulmones, por medio de cuatro venas pulmonares. Al igual que la aurícula derecha, su pared posterior es lisa. La pared anterior de la aurícula izquierda también es lisa, debido a que los músculos pectíneos están confinados a la orejuela izquierda. La sangre pasa desde la aurícula izquierda al ventrículo izquierdo, a través de la válvula bicúspide.
Ventrículo izquierdo
         El ventrículo izquierdo tiene la pared más gruesa de las cuatro cámaras y forma el vértice o ápex del corazón. Al igual que el ventrículo derecho, contiene trabéculas carnosas y cuerdas tendinosas que conectan las valvas de la válvula mitral a los músculos papilares. La sangre pasa desde el ventrículo izquierdo, a través de la válvula aórtica, hacia la aorta ascendente. Parte de la sangre de la aorta ascendente se dirige hacia las arterias coronarias, que nacen de ella e irrigan el corazón.
 
Circulación sistémica y pulmonar
El corazón bombea sangre dentro de dos circuitos cerrados: L circulación sistémica o general y la circulación pulmonar. Los dos circuitos están dispuestos en serie: la salida de uno es la entrada del otro. EL lado izquierdo del corazón es la bomba de la circulación sistémica; recibe sangre desde los pulmones, rica en oxígeno. El ventrículo izquierdo eyecta sangre hacia la aorta. Desde la aorta, la sangre se va dividiendo en diferentes flujos e ingresa en arterias sistémicas cada vez más pequeñas que la transportan hacia todos los órganos, exceptuando los alvéolos pulmonares, que reciben sangre de la circulación pulmonar.  En los tejidos sistémicos, las arterias originan arteriolas, vasos de menor diámetro que finalmente se ramifican en una red de capilares sistémicos. El intercambio de nutrientes y gases se produce a través de las finas paredes capilares. La sangre descarga el oxígeno y toma el CO2. En la mayoría de los casos, la sangre circula por un solo capilar y luego entra en una vénula sistémica.  Las vénulas transportan la sangre desoxigenada y se van uniendo para formar las venas sistémicas, de mayor tamaño. Por último, la sangre retorna al corazón, hacia la aurícula derecha.
El lado derecho del corazón es la bomba del circuito pulmonar; recibe la sangre desoxigenada que retorna de la circulación sistémica. Esta sangre es eyectada por el ventrículo derecho y se dirige al tronco pulmonar, que se divide en arterias pulmonares, las que transportan sangre a ambos pulmones. En los capilares pulmonares, la sangre libera el CO2 y capta el O2 inspirado. La sangre oxigenada fluye hacia las venas pulmonares y regresa a la aurícula izquierda, completando el circuito.

Sistema de conducción
  La existencia de una actividad cardíaca eléctrica intrínseca y rítmica permite que el corazón pueda latir toda la vida. La fuente de esta actividad eléctrica permite que el corazón pueda latir toda la vida. La fuente de esta actividad eléctrica es una red de fibras musculares cardíacas especializadas llamadas fibras automáticas. Estas fibras generan potenciales de acción en forma repetitiva que disparan las contracciones cardíacas.
Los potenciales de acción se propagan a lo largo del sistema de conducción con la siguiente secuencia:
1.    En condiciones normales, la excitación cardiaca comienza en el Nodo Sinoauricular (SA), localizado en la aurícula derecha, justo por debajo de del orificio de desembocadura de la vena cava superior. Las células del nodo SA  se despolarizan en forma continua y alcanzan espontáneamente el potencial umbral. La despolarización espontánea es un potencial marcapasos. Cuando el potencial marcapasos alcanza el lumbral, se desencadena un potencial de acción. Cada potencial de acción se propaga a través de las aurículas, por medio de las uniones en hendidura presentes en los discos intercalares de las fibras musculares auriculares. Siguiendo el potencial de acción, las aurículas se contraen.
2.    Mediante la conducción a lo largo de las fibras musculares auriculares, el potencial de acción llega al nodo auriculoventricular (AV), localizado en el tabique interauricular, delante del orificio de la desembocadura del seno coronario.
3.    Desde el nodo AV, el potencial de acción se dirige hacia el haz de His. Este es el único sitio donde los potenciales de acción pueden propagarse desde las aurículas hasta los ventrículos.
4.    Luego de propagarse a lo largo del haz de His, el potencial de acción llega a las ramas de la derecha e izquierda, las que se extienden a través del tabique interventricular hacia el vértice cardiaco.
 
Finalmente las anchas fibras de Purkinje conducen rápidamente el potencial de acción desde el vértice cardiaco hacia el resto del miocardio ventricular. Luego, los ventrículos se contraen y empujan la sangre hacia las válvulas semilunares.